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Jennifer Simón Carrión
Martes, 10 de mayo 2016, 09:12
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Bajo el lema 'Con la Sanidad no se juega', CSIF junto al resto de sindicatos han mostrado su desconfianza sobre las medidas de ahorro de dicho sector adoptadas por el Ministerio de Sanidad el pasado 24 de abril. "Lo único que propician son desigualdades en los ciudadanos y una bajada en la calidad de las condiciones laborales del personal sanitario", ha apuntado Antonio Moreno, presidente de Sanidad de CSIF Almería.
Según el sindicato, estas directrices afectan a los derechos básicos de los ciudadanos, "ya que un ahorro de este calado puede generar graves consecuencias en la calidad asistencial y en la atención sanitaria". En esta línea, CSIF también recuerda que estas medias contemplan el ahorro en profesionales, lo que repercutirá directamente en los usuarios del sistema, y supondrá el cierre de centros, reducción de camas, de equipos, quirófanos o tratamientos, entre otros.
Para los bancos sí, para la Sanidad y la Educación Pública no
Respecto a la repercusión de estos recortes en la provincia de Almería, Moreno ha recalcado que, a corto plazo, afectará principalmente a los desplazamientos en ambulancia de un colectivo determinado de enfermos, así como al copago de los medicamentos. "Nos parece vergonzoso que el Gobierno realice un recorte de 7.000 euros pero por otro lado esté dispuesto a dar dinero al sistema bancario de nuestro país. Es lamentable que el Ejecutivo haga esfuerzos superlativos por las entidades bancarias y no haga lo mismo para sostener la sanidad y la educación pública", ha puntualizado el presidente provincial.
CSIF también ha explicado que las medidas adoptadas por el Gobierno van a impedir el acceso a la tarjeta sanitaria a un importante número de inmigrantes que viven en nuestro país. De igual manera, lo más preocupante, a juicio del sindicato, es el anuncio del Gobierno de una nueva Cartera de Servicios del Sistema Nacional de Salud, que quedará dividida en tres niveles: la financiada, la que se realiza con "repago", y la de pago.
En conclusión, CSIF, así como todos los sindicatos sanitarios del país, rechaza las medidas del Gobiernos de copagos y "repagos" porque recaen sobre los más débiles: los más enfermos y los más mayores, y los presupuestos del ahorro en necesidades básicas y los recortes adicionales en sanidad porque nos afecta a todos, y la Salud no puede ser objeto de mercadeo.
De esta forma, los sindicatos sanitarios proponen:
Que se incrementen y mejoren los servicios públicos sanitarios.
Que se reforme la gestión del sistema para optimizarlo y sin tomar sólo medidas económicas que recaigan en los usuarios y en los profesionales.
Que se proteja y se cuide a los profesionales sanitarios.
Que haya consenso con los representantes de los profesionales y que no se tomen medidas por Real Decreto que afectan a todos.
Que se apueste por la coordinación entre el sector sanitario y sociosanitario, y se realice mayor inversión en Atención Primaria.
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