El principal acusado de liderar el 'Antas Klan' durante su declaración. IDEAL
Tribunales

«El Antas Klan era un grupo de niños y gente mayor que quería evitar robos en el pueblo»

El principal acusado niega liderar una organización de corte islamófobo y dice que las armas no eran suyas, sino de su compañero de piso

Daniel Serrano

Almería

Lunes, 26 de junio 2023, 14:29

El principal acusado de liderar el 'Antas Klan', que responde a las iniciales D. C. S., ha negado este lunes dirigir una organización que la Fiscalía considera de corte islamófobo y que fue intervenida por la Guardia Civil tras varios episodios de violencia y xenofobia, entre ellos, según el relato del Ministerio Público, la identificación de ciudadanos marroquíes a los que se increpaba por la calle a través de «patrullas nocturnas de vigilancia» que sus miembros iniciaron «asumiendo funciones pseudopoliciales de control e interrogatorio» en el municipio del Levante almeriense.

Publicidad

«Para nada», ha dicho ante el tribunal presidido por Luis Columna. Eso sí, ha reconocido haber oído hablar de ese grupo en su municipio, Antas, de «unos miles de habitantes», donde se conocen «todos».

«Es un grupo de niños y gente mayor, de todas las razas y nacionalidades, que simplemente el único objetivo que tenía era crear patrullas ciudadanas para evitar que hubiera robos en el pueblo. No hubo agresiones ni nada de eso», ha añadido.

Lo ha hecho desde el banquillo de los acusados de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería, donde se ha sentado junto a A. C. L. y a D. R. N., para enfrentarse a una vista oral en la que el Ministerio Público le solicita un total de siete años y medio de prisión tras acusarle de la comisión de dos delitos contra los derechos fundamentales y libertades públicas, uno de ellos en concurso con un delito leve de lesiones, y otro de tenencia ilícita de armas tras haberle intervenido durante un registro en su vivienda dos puños americanos y una navaja negra con una esvástica roja grabada, todas ellas armas prohibidas conforme al Reglamento de Armas de 1993.

A preguntas del fiscal, ha asegurado que «en combinación con el alcalde del Partido Socialista de Antas se tramó un objetivo que consistía en que hubiera vigilancia en el pueblo, gente por las calles, porque los actos delictivos siempre se cometían cuando no había nadie».

Publicidad

«Yo he participado en alguna patrulla ciudadana y lo único que hacíamos era dar paseos. Había gente del PSOE, de Podemos, de Falange, marroquíes, ecuatorianos o rumanos. Nadie estaba vetado», ha insistido.

El acusado ha relatado que en Antas no hay Guardia Civil y que los encargados de la seguridad ciudadana «hasta las diez y media de la noche» es la Policía Local. «A partir de esa hora no hay nadie», ha añadido.

Publicidad

Igualmente ha negado que las patrullas fueran únicamente dirigidas contra marroquíes y extranjeros así como haber parado a alguien en algún momento. «Nosotros teníamos orden de llamar a la Policía en caso de ver algo raro. La propia Guardia Civil conocía estas patrullas. Habíamos hablado, junto con el alcalde del PSOE, con la Guardia Civil y todo estaba comunicado. Fueron ellos quienes nos dijeron que si veíamos algo que grabásemos. Yo mismo mandé al Ayuntamiento y a la Guardia Civil matrículas de coches, como me habían pedido. De ahí a agredir a alguien va a un mundo», ha sentenciado.

Los carteles

El presunto líder del 'Antas Klan', quien ha reconocido ante el tribunal su «miedo» a «ir a la cárcel», ha negado administrar perfiles en redes sociales de corte de extrema derecha y ha señalado que en su antiguo perfil de Twitter usaba el número 88 «porque es el mismo que usaba para jugar al fútbol».

Publicidad

Durante la aproximadamente media hora que ha durado su declaración, D. C. S. ha reconocido que en el verano de 2019 su municipio apareció lleno de carteles racistas. «No sé la fecha exacta pero sí», ha apuntado.

En los mismos se identificaban a la población árabe como la «causa de la inseguridad del pueblo», sentido en el que también se incluían reproches a quienes les alquilaban viviendas.

En sus mensajes decían: «queremos dejar claro también, que son tan culpables las personas que roban como quienes les alquilan sus casas», sentido en el que además añadían que «tan culpable es el enemigo como quien mete en casa al enemigo».

Publicidad

Estos carteles aparecía firmados por el colectivo 'Antas Klan', un nombre que, según analiza el fiscal, «está inspirado en el grupo supremacista blanco Ku Klux Klan». La dirección y toma decisiones del grupo se atribuye al acusado, puesto que además habría participado en la «confección y distribución» de los papeles. «Vecinos de Antas, podéis estar tranquilos, hemos tomado el control de la situación. Volverá a reinar la tranquilidad en nuestro pueblo por las buenas o por las malas», añadían en sus notas.

Con un simple «no» ha contestado el acusado a la pregunta del fiscal sobre si él había tenido algo que ver en la elaboración o pegada de estos carteles.

«Familias necesitadas»

Del mismo modo ha reconocido ser el organizador de un evento celebrado el 12 de octubre en la Era del lugar con motivo del Día de la Hispanidad.

Noticia Patrocinada

«Era una fiesta donde se conmemoraba el Día de la Hispanidad. La recaudación de la barra era para el bar del pueblo e íbamos a destinar una parte de los beneficios a las familias necesitadas de Antas, tanto españolas como rumanas, marroquíes o africanas. Eso sí, solo de Antas porque no teníamos medios para llegar a más», ha precisado.

El acusado en un principio ha dicho que no podía saber si al escenario subió gente con simbología o tatuajes de extrema derecha porque su principal función era «estar en la barra echando una mano».

Eso sí, minutos después ha asegurado ver una bandera con el águila bicéfala con la Cruz de Borgoña «que llevaron militares o guardias civiles» y haber escuchado un discurso «patriota» que él no dio.

Publicidad

«Cuando vi que todo se estaba yendo de las manos intentamos parar el discurso. También se quitaron algunas banderas que vimos que no eran respetuosas porque así nos lo indicaron algunos guardias civiles que había por allí de paisano. Nosotros queríamos que todo fuera bien porque era una fiesta para recaudar dinero», ha añadido.

Sobre un incidente que hubo en esa fiesta con un ciudadano marroquí, el acusado ha asegurado que únicamente acudió a separar. «Estaba trabajando, era el organizador del evento, y vi un altercado y fui a solucionarlo. Eran varios chavales contra él y como lo conozco y no quería que le pasara nada aparte a ambos. Iba hablando con él cuando nos golpearon a ambos y caímos al suelo», ha relatado.

Publicidad

Coleccionista

Por último, sobre el registro domiciliario realizado por la Guardia Civil, D. C. S. ha reconocido que los agentes se llevaron dos teléfonos y un disco duro.

Sobre los carteles del 'Antas Klan' que el acusado tenía en su teléfono, ha dicho que es «coleccionista» y «los niños me dan de todo». «Tengo pegatinas de todos los mundiales, de izquierdas, de derecha, de fútbol. Me ha gustado siempre y no veo que sea un delito guardarlo. Mientras no falte el respeto ni haga nada malo a nadie... es mi casa», ha valorado.

Sobre un cuadro de Hitler encontrado por los agentes, ha asegurado que se trata «de un regalo» que le hicieron cuando tenía «16 o 17 años». «Es un cuadro que está firmado», ha apuntado.

Igualmente ha dicho que las armas encontradas en su vivienda, dos puños americanos y una navaja con una esvástica, no eran suyas, sino de su compañero, tal y como él mismo habría reconocido durante el registro domiciliario.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad