El PP cree que la privatización del agua en Garrucha supondrá un «grave perjuicio» para los vecinos

Desde el PP de Garrucha lamentan que una vez más sean los vecinos los que tengan que pagar la «incompetencia» de un equipo de gobierno que está más preocupado por «salvar los muebles» que por trabajar para conseguir que Garrucha sea un municipio que progresa y en el que se genera empleo y riqueza.

Para los populares la situación es «muy grave» teniendo en cuenta que, según lo acordado por la alcaldesa, el municipio no se beneficiará de ninguna de las mejoras que se van a llevar a cabo desde Galasa. Es más, si hay que hacer alguna obra correrá a cargo del Ayuntamiento garruchero, lo que redundará en un desembolso muy importante para las arcas municipales.

«Dejar Galasa no va a suponer ninguna mejora para las infraestructuras y el precio del agua de nuestro municipio. No vamos a tener mejores servicios por el mismo precio como asegura la alcaldesa, eso es falso y los vecinos tienen que conocer la realidad. Lo único que pretende el Partido Socialista de nuestro pueblo es privatizar un servicio a cambio de castigar a los vecinos. Una vez más ha primado el interés propio del Partido Socialista al interés de todos los garrucheros», manifiestan.

Por último, desde el Partido Popular recuerdan que el Ayuntamiento de Garrucha tiene una deuda aproximada de 11 millones de euros como consecuencia de la «dañina gestión» que María López ha realizado al frente del consistorio.

«Cuando el Partido Popular llegó al Ayuntamiento de Garrucha en 2007 se encontró una deuda de 14 millones de euros que consiguió reducir hasta los 3,5 gracias a una buena gestión. En 2015 llegó María López y en sólo siete años esa deuda asciende a 11 millones de euros, casi se ha cuadruplicado, por ello los concejales del PP vamos a seguir denunciando todas las tropelías que se comenten desde el equipo de gobierno. María López no nos va a callar, Garrucha y los garrucheros tienen que saber la verdad de una gestión socialista que nos está condenando a la quiebra más absoluta», concluyen.