Los ecologistas denuncian la destrucción ambiental en la variante costera de Mojácar

«Dado que este informe desfavorable de la Junta de Andalucía había sido recientemente asumido por el Ayuntamiento, principal promotor de la obra, habiéndose eliminado dicho ramal de la última versión del PGOU, se aprecia mala fe por parte tanto del Ayuntamiento como de Fomento de la Junta y de la empresa que realiza la obra», tal y como exponen los ecologistas en una nota, «al hacer un destrozo que dejaría de facto preparado, destruyendo el ecosistema, el desarrollo del ramal de conexión con la playa que el Ayuntamiento había propuesto y que Medio Ambiente de la Junta había denegado».

En la obra, además, prosiguen desde la coordinadora, «se aprecia una falta total de medidas ambientales como prospección de tortugas moras» y considera que brillan por su ausencia medidas de protección de la obra, que levantan «enormes nubes de polvo que el viento dispersa hacia casas y campos colindantes».

Además, según indican desde el colectivo proteccionista, las excavadoras han «invadido una zona más ancha de la prevista en los mapas» y se han creado «enormes taludes de más de diez metros de altura que crean un impacto y una segregación desproporcionada de los sensibles ecosistemas, además de un devastador impacto paisajístico».

Todo ello, reprochan, «para nada, pues es un vial que solo tiene el fin de dar acceso a unos desarrollos urbanísticos futuros que la Junta de momento ha desaprobado, y con razón, al ubicarse en zonas extremadamente sensibles con tres hábitats comunitarios.

Aprecian, asimismo, que «los mayores destrozos se están realizando en la zona menos visible y más escondida y alejada de la carretera» que consideran «otro factor de mala fe, habida cuenta que hay un recurso contencioso-administrativo en marcha contra la variante, interpuesto por Salvemos Mojácar».