Huércal-Overa procede al reparto de lotes de alimentos a 130 familias vulnerables del municipio

Para llevar a cabo este reparto, antes el Consistorio ha debido preparar el local para cumplir con las medidas de seguridad, higiene y sanitarias establecidas por las autoridades durante el estado de alarma. Así, el lunes se procedió a desinfectar el inmueble donde el martes se descargaron dos camiones de alimentos y posteriormente se volvió a proceder a la desinfección de las instalaciones por parte del personal de limpieza de la Empresa Pública de Servicios a la vez que trabajadores municipales preparaban los lotes correspondientes para cada una de las familias beneficiarias.

El Ayuntamiento de Huércal Overa mantiene una fluida colaboración con la agrupación local de Cáritas, cuya sede se ubica en un local de titularidad municipal desde hace muchos años, y próximamente va a estrechar aún más estos lazos mediante la firma de un convenio que regule las relaciones entre ambos. El documento que se prepara recoge tanto la cesión de uso de ese espacio municipal como la cooperación económica, a través de una subvención con cargo a los Presupuestos Municipales 2020, destinada a sufragar los gastos habituales de transporte de productos procedentes del Banco de Alimentos y que el Ministerio de Agricultura cede a Cáritas para su distribución entre familias vulnerables, ya que este tipo de acciones se llevan a cabo periódicamente a lo largo del año.

En este caso, y debido al estado de alarma y la activación del Plan Municipal de Emergencia, el Ayuntamiento, tal y como ha manifestado la alcaldesa, se ofreció a prestar una colaboración especial. «Los voluntarios de Cáritas, que son quienes habitualmente entregan los lotes a las familias, son de edad avanzada y, por tanto, población de riesgo, tal como nos advirtió su director a finales de marzo a través del área de Servicios Sociales. Conscientes del momento en que vivimos, el Ayuntamiento se ofreció inmediatamente a apoyar con personal propio en las tareas de distribución. A propuesta de los responsables de Cáritas Huércal-Overa, se acordó realizar el reparto una vez pasada la Semana Santa ya que el área de los Servicios Sociales Comunitarios y Municipales garantiza día a día las necesidades básicas de todos los vecinos que requieren de ayuda y los alimentos distribuidos hoy son no perecederos», explica la alcaldesa, Francisca Lourdes Fernández.

Por tanto, cumplir con las exigencias sanitarias que obliga el estado de alarma y en contacto directo con los responsables de Cáritas han centrado esta tarea y «esa es la actitud con la que trabaja este equipo de gobierno desde el minuto uno del inicio de la crisis. No sólo buscamos el mayor rigor posible para garantizar la salud de nuestros vecinos, sino que está en nuestro afán colaborar de manera continua y con lealtad institucional con las distintas administraciones con competencias en la gestión de la crisis. Asimismo, agradecemos a la vez que canalizamos las propuestas generosas y altruistas de voluntarios y voluntarias que nos llegan tanto a nivel de colectivos como de particulares», señala la primera edil.

En este sentido, Francisca Lourdes Fernández ha destacado «la importante labor que realiza no sólo Cáritas en el municipio sino también otras asociaciones, ONGs y colectivos o las cuatro Cofradías de la localidad, que trabajan durante todo el año, y ahora más intensamente, de manera comprometida por el bienestar de nuestros vecinos y vecinas».

Del mismo modo la edil ha elogiado la actuación del personal técnico de los Servicios Sociales Comunitarios y Municipales «que durante el Estado de Alarma están resolviendo de manera rápida y eficaz las demandas de las familias más vulnerables». Hasta la fecha se han tramitado ayudas por un valor superior a 11.000 euros, «y lo más encomiable es que se han gestionado las necesidades de productos de alimentación y de higiene de manera inmediata, para que ninguna familia se quede sin la ayuda que necesita en el mismo día o como mucho en 24 horas». La primera edil asegura que el Ayuntamiento garantiza la cobertura de las necesidades básicas, tanto materiales como psicosociales, a toda la población, a través del Plan de Emergencia Municipal activado a raíz de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19.