Un monolito conmemora el terremoto que destruyó Vera la Vieja en 1518

El autor de la obra, el escultor Roberto Manzano, comentó que ha cumplido el objetivo de «representar el cerro del castillo con una gran piedra en la que se quedarían grabados los nombres de 150 alumnos de los tres colegios de Vera que, a su vez, representarían a las víctimas del terremoto». Las características técnicas de esta escultura consisten en un monolito de mármol de Sierra Elvira de 230 centímetros de altura situado en el centro de un circulo formado por 150 cipreses.

Manzano se inspiró «en la forma de una geoda, pero invirtiendo su estructura. Como resultado, los prismas, la geometría regular que existe en el interior de las geodas, la he trasladado al exterior y actúa de soporte en forma de múltiples triángulos en los que quedan inscritos los nombres de los alumnos».

Otra de las singularidades de la obra, según expuso el autor, es que «la catástrofe del terremoto queda representada con una superficie irregular. La forma del cerro está recortada en el centro de la escultura y funciona a modo de ventana a través de la cual, el espectador puede hacer coincidir este contorno silueteado con el del cerro original que se sitúa al fondo del paisaje. Bajo la ventana, unas grandes grietas en la piedra simbolizan el terremoto».

Manzano ha considerado que «sustituir a las víctimas por los nombres de los alumnos actuales, enriquece el recuerdo de este suceso, complementándolo con un mensaje de esperanza, que se mantendrá más tiempo vivo en la memoria gracias a que estos alumnos constatan la continuación de la vida».

Durante el acto también participaron el alcalde de Vera, Félix López, y el comisario del V Centenario, José Antonio Cano.