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Jennifer Simón Carrión
Martes, 10 de mayo 2016, 10:18
En la Mañana del Domingo Ramos hace su estación de penitencia la Hermandad de la Borriquita. Se caracteriza por la humildad en su cortejo, y siempre acompañados por numerosos fieles portando palmas y ramos de olivo, ya que la procesión litúrgica del Domingo de Ramos precede al Señor, junto al pueblo hebreo representado por niños huercalenses.
Junto al Señor de la Redención, van acompañándolo dos niños hebreos, guiando a la borriquita va Saulo y en la parte trasera portando una palma agarrado al animal, tenemos a Abraham. También forman la parte de la escenografilla del misterio Santiago Apóstol, y también el señor va arropado por su madre Ntra. Sra. de la Paz,
La procesión cuenta con dos partes terminando la primera en la Iglesia Parroquial para la celebración de la Santa Misa.
Real y Venerable Hermandad de Ntro. Padre Jesús Nazareno, Stmo. Cristo de la Misericordia, María Santísima de la Esperanza y Ntra. Sra. de la Amargura. PASO MORADO.
El sábado previo al Domingo de Ramos se traslada al Stmo. Cristo de la Misericordia hasta la Capilla de la Residencia de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados para su custodia y exposición a culto, hasta la tarde del Miércoles Santo que es trasladado por los militares del Grupo de Regulares de Melilla nº 52 al Templo Parroquial para su salida en Procesión.
La noche del Lunes Santo, Ntra. Sra. de la Amargura es trasladada desde Su Ermita del Calvario hasta el Templo, acompañada por cofrades y la devoción de todo un barrio, en un sencillo y emotivo acto.
A las 20:30 horas la Cruz de Guía inicia la Procesión General de la Hermandad, en la que banderas, estandartes y penitentes lucen sus bordados en oro y sedas, acompañados de la rica orfebrería y de las agrupaciones musicales, civiles y militares, que acompañan a las cuatro Imágenes titulares en la noche del Miércoles Santo.
La emoción de ver salir del Templo a Ntro. Padre Jesús Nazareno y al Stmo. Cristo de la Misericordia se acrecienta con la espectacular salida de las Vírgenes de la Amargura y de la Esperanza, con sus costaleros de rodillas.
La procesión se caracteriza por su orden y seriedad y por la variedad de sus grupos de penitentes, culminando en la recogida, en el que tanto Amargura como Esperanza realizan un espectacular encuentro ante el Nazareno, durante el cual las cuadrillas de costaleros escenifican una hermosa coreografía en la que la Madre se postra ante su Hijo. Y majestuosa es la recogida del Cristo de la Misericordia, escoltado por los guiones y banderines de Regulares de Melilla a los sones de la marcha compuesta en su honor por Abel Moreno.
Real, Ilustre y Venerable Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias, San Juan Evangelista, la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor, Jesús en su Tercera Caída y Nuestro Padre Jesús de Pasión Cautivo. PASO BLANCO
El Martes Santo tiene lugar la primera procesión de la Cofradía con la imagen de Jesús Cautivo, procesión austera de marcado carácter penitencial, momentos dignos de ver son el paso de la imagen bajo el arco de la Iglesia y la parada en la casa natal del Cura Valera.
El Jueves Santo constituye el día grande del Paso Blanco. Abren el cortejo las legiones romanas. A continuación el trono de Jesús en su Tercera Caída obra de Guzmán Bejarano. Le sigue el Cristo de la Sangre cuyo trono es portado a costal, obra de Prados López. La imagen es obra de González Moreno. A continuación el grupo de los Hermanos de San Juan portando guiones con los evangelios bordados en oro. El trono de San Juan, a costal, obra de Guzmán Bejarano. La imagen de San Juan es obra de Hernández Navarro. Cierra el desfile la reina del Jueves Santo, la Virgen de las Angustias, imagen de Bellver. Escoltan a la Virgen la Infantería de Marina, la agrupación de Damas de las Angustias y la presidencia oficial de la procesión.
Pontificia, Real, Venerable e Ilustre Cofradía de Ntra. Sra. de la Soledad y Santo Sepulcro del Redentor. PASO NEGRO.
Las procesiones de la Cofradía comienzan el Viernes de Dolores, en que se produce el traslado a la Capilla del Santo Sepulcro de Nuestra Señora de la Soledad desde la Iglesia Parroquial a la ermita del Santo Sepulcro tras la finalización de su novenario.
La procesión del Santo Entierro se caracteriza por la suntuosidad, el orden y la seriedad unidos a la inmemorial tradición de las "Paradas" del Cristo Yacente. Expresión del espíritu, goce para los sentidos, manifestación colectiva de nuestra Fe.
Imágenes: Cristo en la Oración en el Huerto, (José Noguera, Murcia 1954), Santísima Virgen del Río (José Sánchez Lozano, Murcia 1975), Cristo Yacente en el Santo Sepulcro (Alanguas Puchet, Madrid 1948) y Nuestra Señora de la Soledad (José Sánchez Lozano, Murcia 1976).
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