El PSOE acusa al PP de encargar trabajos a Codeur por más de 1,6 millones

Además de la gestión del Ciclo Integral del Agua mediante dos concesiones -una de la zona de la costa y otra del resto del municipio-, Codeur tiene un contrato con el Ayuntamiento de Vera para la inspección y mantenimiento de infraestructuras municipales, además de asesoramiento en cuestiones de proyectos técnicos, «un auténtico cajón de sastre a disposición de los gobernantes», ha valorado el dirigente socialista y cabeza de lista a la Alcaldía el 28M.

Así las cosas, y según ha explicado, el contrato «sólo le garantiza en torno a 600.000 euros de facturación anual pero, sin embargo, desde el ayuntamiento, con la firma del actual alcalde provisional, durante 2022 se le hicieron encargos por valor de más de 1.600.000 euros, según se nos ha certificado recientemente».

«La realidad es que, como venimos insistiendo desde el Grupo Municipal Socialista, el ayuntamiento no debería actuar de esta forma, porque todo lo que sobrepasa de la garantía citada se está ocultando a la libre competencia de otras empresas y profesionales independientes, que tienen todo el derecho a aspirar a contratar también con el consistorio», ha defendido.

Para Martín Gerez lo «más indignante» es que «en multitud de esos encargos municipales, aplicando precios al ayuntamiento poco competitivos, la empresa termina subcontratando los trabajos a otras con importantes márgenes de beneficio». «No hay que olvidar que en 2020 se produjo uno de los más vergonzosos escándalos del PP local con la compra por la propia sociedad, y con el visto bueno de los actuales socios y por 1.632.000 euros -4 veces su valor- de las acciones que le quedaban al antiguo propietario cofundador, y todo para alcanzar la paz social, decían, que era, en realidad, para acabar con las demandas judiciales interpuestas por él contra los dirigentes locales del PP».

Los socialistas consideran que «semejante y abultada» facturación «sólo tiene sentido en la necesidad de generar beneficios para pagar el préstamo que Codeur solicitó para pagar aquella compra de sus propias acciones que indignantemente avaló el propio Ayuntamiento, y es una de las obligaciones que Alfonso García asumió en su camino a la Alcaldía».