Disquisiciones sobre la mediocridad

España es un país de mediocres, los mediocres ocupan todas las esferas de nuestro país, se encuentran en los sindicatos, en la política, en la prensa, entre los empresarios y prácticamente en todos sitios,

Eduardo Sánchez

Martes, 10 de mayo 2016, 08:54

En los sindicatos los mediocres han encontrado un lugar en donde sus puestos de trabajo tienen una mayor estabilidad y de paso consiguen unas horitas libres que dedicar a sus quehaceres, en la política los mediocres son especialmente seguidistas, aquellos que cogen la postura sumisa de seguir a su líder a la espera de que llegue su momento. La prensa esta llena de "estómagos contentos que interpretan la realidad según los dictados de sus jefes que a su vez lo hacen al dictado de sus clientes anunciantes, entre los empresarios los mediocres se instalan en el chanchullo y en el fraude ya sea atacando los derechos de sus trabajadores, sus nominas o defraudando en las cuentas publicas.

Publicidad

 

Porque en España hace ya mucho si es que alguna vez fue así, nuca se ha premiado la creatividad, la innovación, porque el mediocre instalado en todas las esferas de la sociedad impide la competencia del que es más valido que el como estrategia de supervivencia. Una vez hace ya mucho tiempo un amigo que hacía practicas de empresa, recién salido de la universidad, en un importante banco, me comentaba que se había granjeado la enemistad de sus compañeros de trabajo al aplicar nuevos métodos que aumentaban la productividad, ellos se quejaban de que si sus jefes se enteraban que las cosas se podían hacer mejor y mas rapido, con el tiempo, sus jefes les exigirían a todos mejorar. Mi amigo obviamente tras su periodo de becario fue a la calle.

El auge del mediocre se debe fundamentalmente a nuestro ancestral costumbre de contratar, enchufar, al amigo, al primo porque el mediocre defiende su estatus rodeándose de mas mediocres que por lo menos no hagan sombra a su labor y personalidad.

Por tanto a los potenciales talentos en esta país se les mata de pequeños o se les obliga a emigrar, y con esto llegamos a nuestra actual situación, un país que se cae, repleto de ladrones porque el mediocre cuando se vuelve codicioso consciente de sus limitaciones se convierte en un corrupto, sabedor que sus objetivos no se corresponden con su valía.

Y que conste que no creo que todos los sindicalistas, políticos, periodistas, empresarios, y trabajadores sean mediocres, tenenos cantidad y calidad de talento suficiente en nuestro suelo patrio para revertir esta situación, y ya solo es cuestión de tiempo, porque a la vista de las circunstancias actuales el imperio de la mediocridad se esta viniendo abajo sencillamente porque este modelo ya no se sostiene

Publicidad

 

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad