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De las pavadas de la Navidad

Se habrán ya dado ustedes cuenta de que cantidad de mamacharrerías nos han dejado ver en estas últimas semanas previas a este hermoso periodo navideño. Me ha dado por llamarlas las pavadas de la Navidad y no lo digo solo por el tan ansiado pavo relleno y complementos culinarios que mi ex aún me cocina, qué también. De hecho, espero con ansia volver a deleitarme con él. Con el pavo relleno digo, no con mi ex. Aunque ciertamente no estaría diciendo toda la verdad si no confesara que también espero con ganas su compañía en el día de Navidad, e incluso la de mis ex suegros. Porque debo decirles, por extraño que les parezca, que años después de habernos separado, pasamos juntos el día de Navidad, y no solo por eso del "por los hijos", sino simplemente porque nos parece de sentido común.

Gloria Pérez de Colosia

Martes, 10 de mayo 2016, 08:49

Esto me hace pensar en cuantas ex parejas no lo harán, ni por los hijos ni por nadie. Y bien está, a fin de cuentas no hay mejor refrán que ese de "mejor solo que mal acompañado". Y la verdad, tampoco me importa. Pero si me importan todos esos niños de parejas separadas a los que uno de sus progenitores les impedirá, como cada Navidad, ver al otro. Consentido desde los Tribunales, jueces y fiscales mirarán hacia otro lado para que nada les amargue sus propias navidades y ni siquiera por diligencia profesional se molestarán en dar una solución inmediata a los numerosos secuestros de menores que en estos días se avecinan. Si acaso, y a toro pasado, una amonestación a esa madre o padre que los ha retenido. Pero el tiempo es irrecuperable, cuando pasa no vuelve, y el daño ya está hecho, y los recuerdos de unas navidades sin papá o sin mamá quedan implantados en la memoria de estos niños. Cuando además la explicación que se les da es falsa, el constructo futuro de su vida queda dañado para siempre. Como casi siempre, me voy del tema, pero lo cierto es que ni con el intérprete de signos del funeral de Mandela que al parecer vio Ángeles en el estadio, puedo entenderlo. Quizá si el juez Blesa, a quien ahora le ha dado por largar sobre Cajamadrid, se dedicara a enjuiciar asuntos de familia, pudiera contarnos cuales son los criterios internos de estos tribunales para permitir esto. Naturalmente a Rajoy no se le puede preguntar, porque o bien veta las preguntas o bien con una sonrisilla de oreja a oreja dirá que "ganamos el mundial". Y punto. Al ministro de Justicia ni se me ocurre. Se que anda más ocupado en reducir juzgados que en que estos funcionen bien. Me iría a Cataluña a preguntar, aunque con eso del régimen foral allí tienen otras leyes. Además, a los catalanes ya los tienen enredados con sus propias desventuras. Por cierto, resulta casi cómico que el titulo del simposio "España contra Cataluña....", incluya la conclusión incluso antes de desarrollar el contenido. Hay quien lo ha llamado "fragante falsificación de la historia". Júzguenlo ustedes. Consejo: si de verdad quieren hacerlo, no enciendan la tele, busquen su propia información. Nada nuevo sé de mis procedimientos hipotecarios. La tardanza debe ser por ese principio procesal no escrito de no precipitarse al decidir, que para mí que es solo un enigmático e injustificado retraso en la resolución de los asuntos, pero, en fin, aún a pesar de todo, les deseo Feliz Navidad. Sean cautos con los Proyectos y Deseos para el Nuevo Año, porque alguno pudiera cumplirse.

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