DE CONSULTAS, RESPUESTAS PROPORCIONADAS Y ENTRADAS EN PRISION

 

Dejaré claro antes de seguir que mi me gusta que Cataluña sea parte de España y desde luego que parte de España sea Cataluña. Creo que nuestra historia es común y diversa, y que esa diversidad lejos de ser una amenaza es un complemento que deberíamos apreciar y valorar. También dejaré claro antes de seguir que me parece que todo este debate independentista obedece más a una intención política que social. Recientemente he estado en Barcelona en un curso de formación, que por cierto les comentaré que no he podido encontrar ninguno similar en toda Andalucía, creo que porque el tema "no ha llegado". Bien, pues puedo asegurarles que los que viven allí son seres normales, más altos en general que en el sur, pero con dos piernas, dos brazos y unos intereses diarios absolutamente comunes a los del resto de España. Y muchos de ellos, además, descendientes de emigrantes andaluces que eligieron esa tierra para establecerse, por lo que no fue casualidad que mi compañera de mesa tuviera una abuela nacida precisamente en Garrucha. A mi lo que me fastidia de este tema es que haya alguien empeñado en que Cataluña debe separarse de España y alguien empeñado en que no, y a partir de esas dos posturas enfrentadas se ciegue todo lo demás. Y entonces, cómo en muchas otras cosas de las que pasa en Spain is different, todo se convierte en circo. Circo vergonzoso y del malo, porque la pretendida consulta, sin censo, sin control e ilegal, ha sido una pantomima bochornosa; el ridículo de un ciudadano votando hasta 3 veces sin cautela alguna ha traspasado fronteras y ahora andan por ahí riéndose aún más de nosotros; y la actitud del Gobierno, antes y después, ha sido patética, indecorosa e igual de ilegal si me permiten. Entiendo perfectamente por mi profesión y porque cualquiera puede entenderlo, que la actual constitución no legitima a Cataluña a convocar un referéndum que decida sobre su independencia y separación de España. La constitución, que para unas cosas vale y para otras no, no lo permite y punto. Por lo tanto con un argumento puramente legalista no se puede hacer. No obstante esto, Artur Mas convoca una consulta, porque referéndum no puede, pasándose por ahí la norma superior. A continuación, el Tribunal Constitucional, que también manda mucho en nuestro país, declara ilegal la consulta y le dice al Sr. Mas que no puede hacerlo, que no y que no y que de ninguna manera, pero el Sr. Mas vuelve a pasárselo por ahí, y él en sus trece, lleva adelante la consulta. Yo ya en ese punto estaba atónita, pero es que va el Gobierno Central, con Rajoy a la cabeza, que ese si que es el mandamás, y no hace nada. No hace nada. Ni cierra colegios, ni manda a los geos, ni saca tanques a la calle... Es decir, tampoco cumple la ley ni lo que ha ordenado el Constitucional. Eso es desacato y a mi me deja perpleja. Me recuerda cuando de pequeña jugaba al bingo ese casero en el que la mitad de las veces se hacía trampa metiendo la misma bola dos veces o eligiendo el número que uno quería que saliera y los papás no regañaban, pero que en cualquier caso aunque ganaras no servía para nada porque te daban judías o garbanzos. Algo parecido. Lo que quiero decir con todo esto es que me parece que hay que cambiar la actitud. La de todos. Puedo entender, aunque no este de acuerdo, que existe un sector de la sociedad catalana que quiere separarse de España por la razón que sea, por convicción propia, por convencimiento de otro, por intereses económicos, o por cabezonería. Pero aún entiendo más que incluso los que quieren votar no a la independencia, demanden su derecho a voto. Y les apoyo, y creo que todos los españoles deberían votar para que saliera un no apabullante y pudiéramos así trasladar a los catalanes que queremos que se queden y que les necesitamos. Por lo tanto creo que si es la constitución la que de momento no lo permite, que se modifique. A fin de cuentas es del año 78 y todos envejecemos y nos quedamos obsoletos si no nos renovamos. Desde luego el debate político, económico y legal sobre este tema es de una magnitud que yo no puedo abarcar, y es evidente que la independencia autonómica en esos aspectos debe darse de una u otra forma, pero invito a reflexionar sobre lo que Cataluña significa para España, lo que como región con una cultura e historia propia puede aportar al resto de España y nos empeñamos en despreciar y desaprovechar, confío que no sea por envidia. Solo por esto deberíamos decirles a los catalanes que tienen que quedarse en España porque necesitamos que sean parte de España. Y después hagamos lo mismo con el País Vasco, con Galicia, con Extremadura, con Murcia, y con el resto de autonomías, que les recuerdo a los de EGB, antes se llamaban regiones, se les cambió el nombre y aquí no ha pasado nada. Pues algo parecido. Y ya poco espacio me queda, pero como les decía al principio, he estado unos días mirando la tele y me ha sido imposible no enterarme de la entrada en prisión de la Sra. Pantoja. Pues eso, por si alguno no lo sabía, que la tonadillera está en prisión. Dicen algunos que la han metido como medida ejemplarizante. A mi me parece que la han metido porque ha sido declarada culpable y ya está, ahora ya no sé si culpable por eso del dinero o por aquello otro del amor, pero culpable en todo caso. Tomen nota y cuídense.